martes, 29 de noviembre de 2011

In other words... I love you.

Fly me to the moon, 
let me play among the stars.
Let me see what spring is like
on Jupiter and Mars.

In  other words, hold my hand.
In other words, baby, kiss me.

Fill my heart mith song, 
let me sing forever more.
You are all I long for, 
all I worship and adore.





Hoy os deleito con una de las más bonitas canciones de amor, todo un clásico. Espero que la disfrutéis.

Besos, Dylan Sanders.

lunes, 28 de noviembre de 2011

He was not the only one.

                                          



Se dice de los humanos que somos los seres racionales de este planeta. Que somos capaces de controlar nuestros instintos con cierta facilidad (cosa que varía según la persona). Sin embargo, nos encauzamos en guerras que parecen no tener fin. Guerras de las que, si intentas buscar razones o causas es posible que encuentres muchas, pero ninguna lo suficientemente válida para justificar que cientos de personas mueran. 



¿Por qué mueren los soldados? ¿Por la patria? No lo creo. Eso es lo que piensan, y lo que dicen es totalmente respetable, ya que su sentimiento de honor y defensa a su país es puro; pero las razones de las muertes de estas personas, gente que tiene familia, una novia, o un novio, tal vez esposa, o esposo, hijos, padres, tíos, primos, amigos; no es sino los intereses propios del cabeza de Estado, o del Estado en sí. Y cuando decimos Estado en sí no nos referimos a todas las personas que conforman un Estado, sino al enriquecimiento de unas pocas (o muchas) personas que trabajan (por decirlo de algún modo) para todas estas personas que conforman el país en el que viven.



 ¿No es injusto? ¿No es injusto que mientras miles de personas están matándose las unas a las otras, con un sentimiento altruista, unos pocos estén enriqueciéndose a su costa? ¿Y acaso no es también injusto no pararse a pensar en que, aunque estés ayudando a tu país, estás arruinando a otro y asesinando a cientos de personas que, personalmente, no han hecho nada para que decidas que ya no merecen seguir viviendo? Por no hablar de las guerras "santas" en las que la lucha se basa en defender dogmas que algún día alguien creó con a saber qué fin. 



Creo firmemente que una persona ha de plantearse con quién debe de enfrentarse y por qué antes de hacerlo. Y si de verdad esa persona llega totalmente a la conclusión de que debe actuar quitando la vida a esa persona con quien tenía planteado enfrentarse, entonces y sólo entonces, que lo haga. Si no, creo que valdría más la pena quitar la vida a quien te dice que te enfrentes a esa persona.



Amig@s, las guerras son estúpidas. Peace and love.



You were notthe only one.